Entrevista a Nerea

Hoy realizaremos
una entrevista recíproca
sobre este tema: 
 ¿Soy un/una romántico/a?

Uno de los rasgos capitales del Romanticismo reside en su espíritu individualista que equivale a la rebelión del individuo, a la exaltación de la propia personalidad. Los aspectos de mi personalidad a los que rindo culto son: la amabilidad y la timidez que me caracteriza.

El ser romántico se caracteriza también por su aislamiento y soledad. Su individualismo está marcado sobre todo por su conciencia aguda y dolorosa de ser distinto de los demás. Los aspectos en los que me siento muy diferente de los demás es que no me gustan los videojuegos de guerra y que traten sobre la muerte.

El ya mencionado individualismo romántico da lugar a una protesta contra las trabas que hasta entonces tenían cohibido su espíritu, lo cual deriva en un ansia de libertad. Las circunstancias en las que siento que mi libertad se limita cuando tengo que asistir a la escuela en vez de salir con mis amigos.

Los románticos rechazan todo lo racional. Los momentos en los que siento que no me guía la razón sino los sentimientos o la intuición son cuando me enfado con alguien , digo las cosas sin pensar y luego me arrepiento de ello.

En el romanticismo se le concede una gran importancia a las emociones, los sueños o las fantasías. Uno de sus sueños más recurrentes  es trabajar de veterinaria.

El ser romántico siente una gran predilección por lo ideal. Por este motivo buscan desesperadamente la perfección, lo cual explica que los deseosos insatisfechos deriven en frustración e infelicidad. Las metas que me marco en mi vida o los aspectos que me gustaría perfeccionar sería  poder disponer de todo lo qe se me antoje sin tener que preocuparme de nada.

Al haber perdido la confianza en la razón, el/la romántico/a es por naturaleza alguien inseguro e insatisfecho, lo cual da lugar a la desazón vital romántica. Los momentos en los que me siento inseguro/a, insatisfecha/o o que el mundo carece de sentido cuando se me acumulan las tareas  y no sé por donde empezar ni para que me va a valer hacerlas.

El romántico siente la vida como un problema. Su instinto le denuncia la existencia de fuerzas que escapan a todo conocimiento racional y una gran angustia sobrecoge su ánimo. Se cree víctima de un ciego Destino sin justificación. Los momentos en los que creo que yo no controlo mi destino son cuando miro que no voy a poder alcanzar mi objetivo en la vida.

El romántico se encuentra con que la realidad no responde a sus ilusiones. Las ocasiones en las que siento que la realidad no responde a mis expectativas o deseos suelen ser cuando espero algo de una persona y no me dá lo que necesito de ella.

Trabajo realizado por: Nerea y Brais